Soy un buscador de mí mismo que cree en el poder del humor, la autenticidad y la sencillez para encontrar una manera propia y colectiva de vivir mejor. Soy el afortunado esposo de la mujer más hermosa de la vida, que me acompaña en todo este viaje, y el papá de dos niños graciosos, inquietos y puros que iluminan y guían mi camino.

Aunque estudio y me apasionan algunas cosas en particular, no soy politólogo, deportista, payaso o improvisador profesional, ni practicante avanzado de las enseñanzas de Thich Nhat Hanh. Me gusta utilizar estas actividades y sabias enseñanzas para descubrir lo divino y humano en mí, en los otros y en el mundo para comprenderlos mejor y vivir de una manera más divertida, compasiva y amorosa.

No tengo del todo claro quien soy y no me atrevería a escribirlo porque me descubro y me transformo día a día. Con la ayuda de los maestros de la vida disfrazados de sencillez y de sus enseñanzas, de mi familia, amigos y todos los maravillosos seres que encuentre en este viaje me seguiré encontrando… para luego volver a cambiar eternamente.